miércoles, 1 de agosto de 2018

Ya no te amo.


YA NO TE AMO, no
ya apenas amo tu recuerdo
hecho jirones por el tiempo

una silueta ardiendo
al sol de las chicharras
el pecho de un abrazo entregado
una mano sobre el lienzo de mi cuerpo

pero  amo el recuerdo
que de mi guardo amándote
con la certeza de los locos
dispuesta a saltar al vacío de tus ojos
sólo por escuchar cómo mueres
pronunciando mi nombre

miércoles, 18 de abril de 2018

NO SERÉ YO


 No seré yo quien te salve de tu miedo a estar solo
No serás tú quien me salve de mí

Tal vez, no tenga uno que salvarse
de nada ni nadie

La vida es un riesgo constante que yo asumo

Al acecho andan nuestros monstruos

 

sábado, 7 de abril de 2018

DISCÚLPAME SI TE ODIO UN POCO


Discúlpame si te odio un poco,
al fin y al cabo
soy yo la que salgo perdiendo.
Que perdí a un compañero y un sueño,
un paisaje, mi casa, un árbol…
Que, por amarte, me perdí.
Me perdí  hasta el respeto.
Que a mi fe ciega en el amor
se le cayó la venda de los ojos
y ya no osa ni mirar.

Discúlpame si te odio un poco,
al fin y al cabo
soy yo la que salgo perdiendo.
Que tú, ganador por destino,
ganaste de nuevo.
Te quedaste la sonrisa,
el  paisaje, tu castillo,
y un sueño en el que yo ya no quepo.

Discúlpame si te odio un poco.
Compréndelo, es mi rabia.
Es lo último que me queda de ti.

lunes, 2 de abril de 2018

Un invierno demasiado frío, demasiado largo


Es este un  invierno 
demasiado frío para no tener
con quien compartir cama.
Demasiado largo para no tener
a quien abrazar al llegar a casa.

Es este un invierno
demasiado árido para sembrar sueños,
para alumbrar ilusiones,
para amamantar esperanzas.

Es este un invierno demasiado frío
para acuclillarse en una esquina
y mendigar un beso.

jueves, 29 de marzo de 2018

LOS CRISTALES DE TU NOMBRE


Es lo indomable,
lo que te barra el vuelo
lo que malvive en la caverna,
en el  lodo más putrefacto del odio y el deseo

Es su fantasma,
escapado de una curva del cerebro
lo que te sobresalta
en la noche de las cuatro

Es él sin serlo,
de nuevo él,
el que ha ultrajado tus sueños,
y tienes la certeza
por el regusto a óxido en la boca
y los cristales de su nombre
aún en la garganta